Una semana menos para estar con todos vosotros. Pero, mientras esperamos ansiosos darnos un abrazo de esos de dos metros de distancia ?, vamos a seguir recordando otra de las bodas que hemos acogido en Los Chopos. Esta boda fue muy especial porque Cristina y Alfredo demostraron que disfrutaban de un amor sobre ruedas. ¿Por qué? Sólo tenéis que ver cómo se encaminó Cristina hacia el altar…
Está claro que Cristina y Alfredo son dos apasionados de las motos y así lo quisieron plasmar en su boda. Porque, como siempre os digo, no hay nada mejor que la boda sea una continuación de vosotros, de vuestras aficiones, de eso que os apasiona y que compartís juntos… En este caso, fue un amor sobre ruedas desde que se conocieron y así se lo quisieron demostrar a todos los familiares y amigos que les acompañaron durante ese día tan especial para ellos.
Y nada más entrar en nuestros Jardines, ya estaba claro que Cristina y Alfredo vivían un amor sobre ruedas. Y el primer beso del día fue acompañado del rugir de los motores de sus amigos. ¡¡¡Dulce melodía para sus oídos!!!
Otro elemento de la decoración en el que no podía faltar la referencia a las motos era en el Seating Plan, que tenía en cada mesa el nombre de un mítico circuito del motociclismo mundial, como no podía ser de otra forma. Seguro que «hubo tortas» por sentarse en la mesa del Circuito de Jerez, el Templo del motociclismo.
Y, por si alguno tenía alguna duda, en el espacio habilitado para que sus invitados les dejaran unas palabras, también había una foto que dejaba claro que se querían y que les unía su pasión por las motos.
Como podéis ver, Cristina y Alfredo trasladaron su pasión al día de su boda. Fue una boda con una gran personalidad y que quedó en el recuerdo de todos sus invitados. Cristina y Alfredo compartieron con sus amigos su amor sobre ruedas.
Por Clara Bouquet.