Clara Bouquet
… al hombre que yo quiero. ¡Qué poco se estila ya el fumar para desgracia de la querida Sara Montiel! Sin embargo, las bodas son un momento en el que a muchas personas les apetece fumar pues son un gran evento social y de esparcimiento, por lo que no está de más facilitar esta costumbre a los invitados. ¿No es uno de nuestros objetivos que nuestros amigos y familiares sean felices y disfruten el día de nuestra boda?
Cada vez se estila menos eso de que el novio y el padrino repartan puros entre sus invitados. La ley Antitabaco está dejando en desuso esta costumbre. Sin embargo, eso no quiere decir que haya que prohibir fumar, ni mucho menos. Para facilitar el disfrute del tabaco a los invitados que lo deseen, cada vez es más normal ver en las bodas los llamados «Cigar córner» o «Cigar candy». ¿Qué qué son? Son espacios habilitados para el disfrute de los fumadores. En este rincón podrán encontrar puros y cigarros de varios tipos, así como los elementos necesarios para su degustación: cortadores de puros, cerillas, mecheros, ceniceros… Además, en muchas ocasiones este coqueto rincón se complementa con la disposición de algunos licores, gominolas, chicles e , incluso, chocolatinas.
Respecto a su ubicación en el evento, lo normal es hacerlo en el exterior, sobre todo por aquello de cumplir con la legislación actual 😜, y sobre su presentación, lo ideal es presentar los puros, lo más delicado, en bandejas o humidores, que son cajas de madera que mantienen la humedad para su perfecta conservación.
Además, el «Cigar córner» será otro espacio en el que podréis plasmar la decoración de la boda. Y ya sabéis mi obsesión con que el evento tenga una línea decorativa y temática uniforme. También podéis utilizar los puros y las cajas para poner vuestros nombres y las fechas del enlace, personalizando, aun más, este precioso rincón.
¿No os parece una idea maravillosa? Otra forma de hacer que nuestros invitados se sientan como en casa… e importantes el día de vuestra boda.